Las mejores croquetas de Madrid

A pesar de tener su origen en Francia, las croquetas son una guarnición o entremés muy típico de la comida española, precisamente como resultado de la diversidad cultural que la gastronomía heredó de las épocas de conquista y colonia. Para quienes no están muy familiarizados, este alimento consiste en una porción de masa que tiene como base una salsa densa o espesa como la bechamel, en combinación con ingredientes de cualquier tipo. La preparación se reboza generalmente en huevo y pan rallado para finalmente freírse en abundante aceite. El resultado es un bocado crujiente por fuera y suave por dentro.

Por suerte, la capital del país cuenta con una variedad de opciones para el disfrute gastronómico nacional, desde las alternativas más caseras hasta las experiencias más gourmets, en donde se pueden degustar una variedad de entremeses típicos como las populares patatas bravas o las más exquisitas croquetas. En el marco de la 36ª edición de Salón Gourmets, la Feria Internacional de Alimentación y Bebidas de Calidad, líder del producto de alta gama en Europa que se va a celebrar próximamente en IFEMA MADRID, los amantes de la gastronomía pueden adentrarse en un recorrido previo que los llevarán a disfrutar los rincones de las mejores croquetas de Madrid.

Solo de Croquetas Echegaray

Como su nombre indica, Solo de Croquetas Echegaray Madrid es un establecimiento especializado en la preparación de estos aperitivos y, por supuesto, es un destino no puede quedar fuera. En su menú cuentan con más de 30 opciones de croquetas, tanto saladas como dulces, preparadas con una diversidad de ingredientes.

Lo más atractivo de este lugar es que todas sus croquetas son libres de gluten, por lo que son un espacio ideal para los celíacos. Asimismo disponen de una amplia selección de croquetas sin lactosa y croquetas veganas para disfrutar de su exquisitez de forma saludable y adaptado al gusto de todos.

Se encuentra ubicado en Calle Echegaray 5.

Santerra

Este majestuoso restaurante presenta platos clásicos de la cocina española contemporánea al más puro estilo gourmet, preparados de la mano del chef Miguel Carretero. Los productos de primera y la tradición del país se combinan en presentaciones de alta cocina, que son un espectáculo al paladar, un hecho incluso reconocido nacional e internacionalmente.

La croqueta artesana de jamón ibérico de Santerra no solo es considerada una de las mejores croquetas en Madrid, sino que llegó a ser reconocida como la mejor del mundo en el IV Campeonato Internacional Joselito de Madrid Fusión en 2018. Sin duda, probarla no dejará de ser una experiencia fascinante.

Está ubicado en Calle de Gral. Pardiñas, 56.

Casa Julio

Este mítico bar tradicional de tapas cuenta con más de 100 años de historia y brinda además de sus populares y sabrosísimos tentempiés un ambiente acogedor para sus visitantes. La preparación de sus croquetas resulta en un sabor que evoca las tascas tradicionales de antaño y la cocina de la abuela. Estas tapas son, por supuesto, la opción más solicitada por quienes frecuentan el lugar y pueden ser servidas en raciones o medias raciones.

Los sabores para elegir son muy diversos y entre ellos se pueden mencionar las de picadillo, pasas y gorgonzola, espinacas y la exótica combinación de morcilla con membrillo.

Visítalo en Calle de la Madera, 37.

Melo’s

Tras su reciente reapertura, Melo’s Bar ha buscado continuar su tradición de 40 años de historia y buena comida en el barrio. Desde luego, las croquetas Melo’s, en conjunto con los populares sándwiches llamados zapatillas, son una de las opciones más solicitadas por sus clientes desde siempre, un hecho que no ha cambiado tras su reinvención.

Un aspecto a favor de este renovado espacio es que las raciones que sirven son generosas, por lo que en ocasiones resulta conveniente ser comedido con lo que se pide. Los ingredientes estrella, como buen local de tradición gallega, son el queso de tetilla y el lacón. Con este último preparan una de las mejores croquetas en Madrid, con un interior de bechamel líquida con tropezones de la proteína, un rebozado grueso y crujiente y un sabor único y exquisito.

Puedes ir en Calle del Cave María, 44.

El Jefe

Otra croquetería de Madrid obligada en este recuento debe ser sin duda la de El Jefe. Aunque es un restaurante especializado en carnes, entienden a la perfección el concepto de una buena croqueta, al preservar la cremosidad por dentro y la agradable textura crujiente por fuera, sin dejar de lado el buen sabor de esta guarnición. Para ello, controlan perfectamente la temperatura de la bechamel y utilizan un panko especial para el rebozado.

En su menú se presentan dos opciones de este popular tentempié. Una de ellas son las tradicionales croquetas de jamón, elaboradas con jamón ibérico en pequeños daditos y presentada en porción de 8 unidades. Por otra parte, también se encuentran las croquetas tigre, en porción de 6 unidades, preparadas a base de un sofrito que cuenta con ingredientes como zanahoria y puerro, pimiento rojo, guindilla, salsa de pimiento choricero, salsa de tomate casera, sal, pimienta y picada de mejillones.

Está ubicado en Calle de Alonso Cano, 103.

Terracotta

Este nuevo y mágico lugar se inspira en un concepto de artesanía gastronómica al tener como referencia la terracota, aquel material de arcilla modelada y endurecida al horno que fue utilizado para levantar imperios y engalanar palacios y mesas. Su modelo de cocina se centra en una oferta de platos típicos de la tradición española pero con recetas y presentaciones más que innovadoras.

Está ubicado en Calle Velázquez, 80.

Viridiana

El restaurante de Abraham García ofrece platos originales, sorprendentes y de mucho sabor, considerado como el pionero en la cocina fusión en España, y caracterizado por la presencia de ingredientes exóticos desde hace cuatro décadas que al día de hoy son imprescindibles.

La cremosidad de sus croquetas está en gran medida garantizada gracias a la utilización de leche de ovejas autóctonas de Navarra, lo que sin duda le brinda una experiencia única e inolvidable al paladar. El ambiente combina la alta cocina con distintas expresiones del arte y la tradición española y por ello también resulta en un placer para la vista y el olfato.

Entre las imprescindibles opciones a la carta de este lugar se hallan las croquetas de carabinero, que se muestran en el plato con un velo ibérico y alioli de ajo negro. Tanto su presentación como sabor son una experiencia única que vale la pena probar.

Se encuentra en Calle Juan de Mena, 14.

Seeds

Este es un espacio naciente creado como restaurante escuela por el centro educativo gastronómico MOM Culinary Institute y que tiene como responsable al chef  Paco Roncero. Su nombre, que significa semillas en inglés, defiende el concepto de que la semilla es el inicio. Así se han asentado en la tradición española y emprendido un viaje en vanguardia. Sus ingredientes son materia prima de la más alta calidad, cuyos resultados en el plato brindan un sabor a hogar y pizcas de aire fresco.

Innovación, creatividad y vanguardia se combinan con el ingrediente principal, la pasión, para presentar opciones en el menú que son sencillamente una experiencia revolucionaria en sabor. Las croquetas de gambas al ajillo aliñadas de este lugar son un paraíso para el paladar.

Está ubicado en Calle de Serrano, 95.

Bodega de la Ardosa

Definido como un viejo local de sangre renovada, este bar se encuentra entre uno de los Restaurantes y Tabernas Centenarios de Madrid con una tradición que data desde el año 1982. Este lugar también resulta una parada obligada para los amantes de las croquetas porque sus presentaciones son más que variadas y cuentan con un sabor que evocan las más puras recetas y experiencias de antaño.

En su menú destacan las croquetas de cabrales o jamón; croquetas de carabinero, cecina o bacalao y croquetas de choco en su tinta o rabo de toro. Los sabores son inigualables y se puede combinar con una variedad de opciones disponibles en la carta para blindar la experiencia. Además, este bar tiene una historia riquísima en cuanto a la comercialización de cervezas europeas, por lo que si se desea vivir algo tradicional e histórico, acompañar las exquisitas croquetas con una de sus más populares cervezas es la mejor opción.

Lo encontrarás en Calle de Colón, 13.