Las smart doors del futuro permitirán el contacto automático con los visitantes
El Presidente del Consejo General de Ingenieros Industriales, Miguel Iriberri Vega, explica en la siguiente entrevista cómo serán los edificios del futuro
¿Qué sucede si llega a nuestro domicilio antes de tiempo un amigo o un repartidor, y no estamos en casa? Las puertas automáticas del futuro solucionarán este problema. En el primer caso, le abrirán con nuestra autorización; y en el segundo, le darán acceso a un buzón inteligente para que deje allí su mercancía. Esta será una de las características de los edificios del futuro, junto a la eficiencia energética, la domótica y la sostenibilidad, según Miguel Iriberri, Presidente del Consejo General de Ingenieros Industriales.
¿Cuáles son las principales tendencias que se observarán en los edificios de los próximos años?
Los edificios del futuro son ya casi del presente. Cuentan con elementos activos y dinámicos, en contraste con los edificios pasivos puramente estáticos del pasado. Se trata de edificios completamente interactivos, con el uso y con el personal que los van a habitar. Y esto es posible gracias a todas las tecnologías utilizadas, que van a permitir adaptarse a cada una de las situaciones, tipologías y personas.
Además de la tecnología, ¿la eficiencia energética será una de las principales claves de estos edificios?
Efectivamente. Los edificios son elementos que tienen un gran consumo energético en ámbitos, entre otros, como el térmico y el eléctrico. Las nuevas tendencias y legislaciones están provocando que se vaya hacia edificios de consumo nulo o prácticamente nulo, e incluso que las instalaciones puedan hacer vertidos a las propias redes de suministro para generar energía. Así, el edificio ya no va a ser puramente consumidor, sino que también va a aprovechar toda la tecnología disponible para que sus instalaciones generen energía.
¿Qué contribución hará el sector de puertas automáticas y motorizadas a los edificios del futuro?
Yo distinguiría dos líneas. Por una parte, lo que podríamos denominar como cerraduras inteligentes. Y, por otra, las puertas inteligentes, capaces de permitir el contacto automático entre el propietario de una vivienda o local y sus visitantes.
Hoy en día, la comunicación es absolutamente vital, y la clave que conecta a los edificios, viviendas y locales con su entorno son las puertas. Actualmente, ya contamos con elementos como aperturas telemáticas, dispositivos inteligentes, alarmas y avisos, y dispositivos de reconocimiento facial y de huella. Pero habría una segunda fase con el funcionamiento telemático de la puerta. Por ejemplo, si llega un amigo o un repartidor a realizar una entrega programada y no estamos en casa o en la oficina se le podría dar acceso automático y visualizado con cámaras y sensores, o desviarle hacia un buzón inteligente que permita la entrega de mercancías. Otra de las posibilidades será la comunicación con la propia puerta de la vivienda, a través de distintos dispositivos, para organizar la compra, recibir avisos e interactuar sobre la temperatura, las luces y otros elementos. Y todo ello gracias a desarrollos como el big data, la inteligencia artificial y las simulaciones.