Los 5 errores a evitar para no ser sancionados en una inspección
En la última campaña de inspección llevada a cabo por las autoridades competentes en seguridad industrial, 96 de cada 100 puertas comerciales, industriales y de garaje presentaban incumplimientos en aspectos relativos a su marcado CE o requisitos de seguridad obligatorios. Desde CEportal explican los errores más habituales que cometen los fabricantes, instaladores y empresas de mantenimiento.
En la última campaña de inspección llevada a cabo por las autoridades competentes en seguridad industrial, 96 de cada 100 puertas puertas comerciales, industriales y de garaje presentaba incumplimientos en aspectos relativos a su marcado CE o requisitos de seguridad obligatorios. Debido a esta situación, se ha puesto en marcha una nueva campaña de inspección a nivel nacional con un aumento muy significativo en el número de puertas inspeccionadas y un endurecimiento de las sanciones. Estás últimas pueden llegar a los 6 millones de euros en infracciones graves y suponer una retirada de la puerta inspeccionada, así como la totalidad de las puertas similares que hayan sido instaladas.
Desde CEportal explican que “tras las numerosas consultas recibidas en nuestra ingeniería de empresas que han sufrido inspección en alguna de sus puertas comercializadas, estos son los errores más habituales que cometen los fabricantes, instaladores y empresas de mantenimiento”:
La placa CE debe estar colocada en un emplazamiento visible de la puerta y tener un formato y campos de información adaptados a lo establecido en el Reglamento de productos de la construcción y la Directiva de máquinas (puertas motorizadas). El titular de la puerta debe disponer de la declaración de prestaciones y de conformidad y, de no ser así, el fabricante de la misma debe disponer de una copia que poder suministrar a la inspección.
1. Realizar el marcado CE como "fabricación por unidad" en puertas de garaje y comerciales.
Difícilmente ante las autoridades que llevan a cabo las inspecciones, se puede justificar que una puerta instalada en un garaje o un comercio se trata de una fabricación por unidad. El marcado CE mediante "fabricación por unidad" puede ser usado para puertas singulares, únicas y fabricadas bajo criterios de diseño y prestaciones impuestos por el cliente para ser instaladas en edificios singulares o aplicaciones especiales. Es muy complicado que esto se cumpla en puertas instaladas en garajes o comercios.
3. No realizar mediciones de fuerza de impacto y anti-aplastamiento.
Aunque una empresa disponga de un certificado que justifica que un tipo de puerta automática cumple los ensayos de limitación de fuerzas, cada unidad que se instala debe cumplir las fuerzas máximas de impacto, tiempo anti-aplastamiento y fuerza residual en los puntos de medida especificados en la norma. Estas mediciones son obligatorias igualmente en puertas manuales que se motorizan o cualquier otra "modificación sustancial" llevada a cabo en una puerta existente.
4. Entregar la documentación y marcado CE individual de los componentes que componen la puerta y pensar que es suficiente.
Una empresa que comercializa una puerta completa, debe realizar un marcado CE y entregar una documentación de dicha puerta en su conjunto, aunque no haya fabricado ningún componente y solo haya realizado el ensamblado y/o automatización. En este caso no será suficiente la entrega de la declaración de prestaciones de la puerta manual y las declaraciones de conformidad de cada uno de los componentes eléctricos que la componen (motor, cuadro, fotocélulas, sistema de mando...). Recordamos que, al margen de la placa CE y declaraciones, es obligatoria la entrega del manual de instrucciones de instalación, uso y mantenimiento, así como el libro de mantenimiento de la puerta instalada.
5. Incorporar elementos de seguridad insuficientes debido a los riesgos del entorno.
Además de los dispositivos de seguridad que debe disponer la propia puerta, se debe realizar un análisis de riesgos en el entorno de instalación. Principalmente en puertas correderas y batientes, la distancia y composición de los cerramientos cercanos a la hoja de la puerta en las operaciones de apertura y cierre pueden suponer peligros de aplastamiento. Para evitarlo, es fundamentar realizar un análisis de riesgos según los requisitos establecidos en la normativa de aplicación y atendiendo al tipo de usuario, entorno y tipo de activación. En función de este análisis se deberán incorporar los elementos de seguridad necesarios.