La convergencia de amenazas exige una visión integral de la seguridad
La creciente convergencia entre amenazas físicas, electrónicas y ciber-riesgos exige una visión cada vez más integral de la seguridad, que aborde todas las necesidades en la protección de vidas y bienes. Paloma Velasco Merino, Directora Ejecutiva de la Asociación Española de empresas de Seguridad (AES), y Anna Aisa Biarnés, Gerente de la Asociación Catalana de Empresas de Seguridad (ACAES), explican las nuevas tendencias en este ámbito.
Paloma Velasco, Directora Ejecutiva de AES, advierte que la seguridad integral es absolutamente fundamental en el ámbito de actuación de nuestras empresas. “De hecho, aunque la asociación nació en 1981, cuando solo se conocían compañías de las llamadas de ‘seguridad física’, nuestros asociados están en constante evolución, dado que se dedican a la industria de la seguridad física y de la vigilancia electrónica”. Esta área de actuación está fuertemente marcada por la evolución de los sistemas y, consiguientemente, de los productos y servicios que ofrecen, por lo que las empresas han virado cada vez más hacia una seguridad integral en estos productos y servicios”.
En consecuencia, Velasco explica que “ahora mismo se están centrando en la ciberseguridad, la analítica de datos o el análisis forense predictivo”. Y están incorporando estas funcionalidades a todos los equipos físicos y electrónicos, como las cajas fuertes, los sistemas de protección contra incendios o el control de accesos, entre otros muchos. “Así, podemos constatar la llamada ‘convergencia’ entre la seguridad física y la seguridad lógica, hacia una seguridad integral completa, siempre trabajando en la protección de vidas y bienes”.
Mayor coordinación
Anna Aisa Biarnés, Gerente de ACAES recuerda que la seguridad integral “aparece por primera vez mencionada en la ley de Seguridad Privada, en la que se recoge como uno de los factores determinantes de la necesidad de sustituir la anterior ley por la actualmente vigente”. Y afirma que “integrar lo que conocíamos como ‘seguridades’ en una sola, es fundamental para poder afrontar los riesgos actuales”.
Según opina esta experta, “ya no puede hablarse de seguridad electrónica, seguridad física, seguridad humana, ciberseguridad, etc. de forma independiente, como si fueran diferentes parcelas incomunicadas entre ellas”. Y añade que “la realidad y las necesidades de los clientes comportan necesariamente una visión integral que determina la definición del servicio de seguridad privada a prestar al cliente, y en la que se coordinan tecnología, electrónica, medios humanos y logística”. Así, concluye que “es precisamente esa visión integral la que da calidad a los servicios”.