El sector de los EPI evoluciona hacia la economía circular
Las empresas del sector de los EPI se mueven en un ámbito muy competitivo, en el que hay cada vez mayor demanda de equipos sostenibles, según afirma Javier Díaz Alonso, responsable técnico de Asepal, la Asociación de Empresas de Equipos de Protección Individual. Además, este experto advierte que el marco legislativo será cada vez más exigente a la hora de establecer requisitos relacionados con la economía circular y la sostenibilidad.
La prevención de riesgos laborales ha decidido acelerar su camino hacia la economía circular. Durante la pasada pandemia pudimos ver una gran cantidad de equipos de protección individual, como mascarillas, guantes desechables y otros tipos de EPI, que generaron cantidades ingentes de residuos que, en su mayoría, no pueden ser recuperados. “Este escenario nos ha servido para tomar conciencia de la importancia que la sostenibilidad y la economía circular tienen en este sector, en el que ya se están produciendo pasos agigantados en aras de lograr EPI más sostenibles”, afirma Javier Díaz Alonso, responsable técnico de Asepal, la Asociación de Empresas de Equipos de Protección Individual.
Díaz explica que las empresas del sector están realizando notorios esfuerzos en ámbitos como “la reducción de sus huellas de carbono, conseguir EPI con un mayor porcentaje de materia prima reciclada, equipos más duraderos, minimizar el uso de plásticos en los embalajes y un largo etcétera, que hará, en un futuro cercano, que la protección de las personas frente a los riesgos a los que se enfrentan en su ámbito de trabajo no ponga en entredicho el medio ambiente.