Susana Romero (AEPSAL): “La prevención debe tener en cuenta factores como la edad, género y diversidad del trabajador”
Susana Romero, secretaria general de AEPSAL, Asociación de Especialistas en Prevención y Salud Laboral, afirma en la siguiente entrevista que hay que hacer una prevención centrada en el trabajador que tenga en cuenta factores como la edad, el género o la diversidad. Además, explica que, en la integración real de la PRL en la empresa, sobre todo en pymes y micropymes, y en sectores como el primario, queda mucho trabajo por hacer.
¿Cómo ha evolucionado el conocimiento de la seguridad y salud laboral en los últimos años en España?
En términos generales, podría decirse que existe el conocimiento de que la empresa debe proteger a todas las personas trabajadoras de la exposición a aquellas situaciones o actividades laborales que pueden provocar un daño en la salud. En muchas empresas la PRL es un factor estratégico y se trabaja activamente la promoción de salud y bienestar. Pero el llevarlo a la práctica, el conseguir la integración real en la empresa, sobre todo en pymes y micropymes, sectores como el primario…. queda muchísimo trabajo por hacer. A día de hoy, vemos que estamos lejos de conseguirlo, en medio de una gran crisis económica-social y medioambiental mundial con los peores índices de siniestralidad y absentismo de los últimos años y una “pandemia oculta” derivada del impacto de esta situación en nuestra salud mental.
Hablando de la pandemia, ¿qué supuso el covid en el impulso de un mayor conocimiento y concienciación de los riesgos por parte de los ciudadanos?
Tres años después de que el covid-19 apareciera en nuestras vidas, nos encontramos ante una nueva sociedad (transformada, debilitada más si sumamos la grave crisis, y con nuevas necesidades), que ha cambiado su forma de relacionarse, de trabajar y por tanto de hacer prevención. Sin duda, las empresas han visto cómo la salud de sus empleados/as, colaboradores incide directamente en su negocio, pero si atendemos a los datos actuales de absentismo y siniestralidad… poco hemos aprendido.
El 2020 nos dejó con un aumento de la siniestralidad del 17% y más de un millón de personas que no acudieron a su trabajo por motivos de salud, por no hablar del crítico empeoramiento de nuestra salud mental (la mitad de la población laboral han sufrido o sufren ansiedad o depresión por motivo de trabajo). Si bien hay un gran número de sectores y empresas que están promocionando la seguridad y salud de empleados y empleadas, seguimos sumergidos en la cultura del cumplimiento, donde hacemos prevención reactiva, más que pro-activa.
Hablando del sector en España, los especialistas en seguridad y salud laboral hemos evolucionado y se nos han asignado nuevas responsabilidades. Pero la sociedad se ha olvidado en parte ya de esto, como ha ocurrido con el sector sociosanitario. Estamos viviendo un aumento de las renuncias de los profesionales en PRL, fruto de la elevada carga, el empeoramiento de condiciones laborales y el agotamiento acumulado entre otros factores.
¿Cuál es la importancia de la investigación y la divulgación para mejorar la prevención de riesgos?
Sin duda es muy importante. El trabajo y los lugares de trabajo están sometidos a cambios continuos por la introducción de nuevas tecnologías, sustancias químicas y procesos de trabajo, por cambios en la estructura de la población activa y del mercado laboral, y por formas nuevas de empleo y organización del trabajo. Cambios importantes, que se desarrollan a gran velocidad, ante los cuales necesitamos una población laboral que deberá aprender a trabajar con máquinas inteligentes, en la que conviven edades con necesidades diferentes (dado el envejecimiento de la población activa) y ante la cual la normativa laboral y metodologías de trabajo en el área de seguridad y salud laboral deberían dar respuesta en el mismo plazo.
Todo ello exige un compromiso firme de invertir en políticas activas preventivas a nivel privado e institucional, de concienciar de las consecuencias de no hacer prevención y de sus beneficios haciendo uso, por qué no, de los medios de comunicación y de nuevas formas de comunicación para llegar a todos/as. De esta forma AEPSAL está participando no solo en jornadas técnicas, sino colaborando con medios de prensa y radio acercando el mensaje a toda la sociedad.
Ante este escenario, desde AEPSAL reivindicamos hacer una prevención centrada en el trabajador que tenga en cuenta factores como la edad, el género o la diversidad. No podemos hablar de proteger la salud y seguridad mientras exista precariedad, desigualdad, contratación irregular; mientras no exista cultura preventiva y el empresario medio considere la prevención como un “impuesto más”. Necesitamos el compromiso político e institucional para trabajar juntos por el cambio social que empieza por mejorar las condiciones laborales: ¿qué nivel de conciencia preventiva tiene la empresa que sostiene sus beneficios con contratos precarios?, ¿cómo va a escuchar un trabajador una charla de PRL que le “obligan asistir porque la pide el cliente” cuando trabaja con miedo?