¿Qué es tokenizar? Descubre la tokenización
La diferencia entre un Token fungible (una criptomoneda) y un token no fungible es que los NFT son únicos, y su precio varían en función de un acuerdo de compraventa. Mientras que todos los tokens -como el Bitcoin o Ethereum- son iguales y tienen el mismo valor según la demanda del mercado, no existen dos colecciones de NFT que se parezcan.
Con el auge de la economía digital, la tokenización de activos en las empresas se ha convertido en un campo de experimentación para explorar nuevos modelos de negocio y desarrollar herramientas de fidelización entre los clientes. Tokenizar es el proceso mediante el cual las compañías pueden emitir su propio token, respaldada con sus propios activos tradicionales (por ejemplo, acciones y bonos de deuda); divisas (dólares y euros), y otros activos no financieros (por ejemplo, el sector inmobilario y obras de arte) para obtener financiación. Por tokenizar también se entiende como la acción de incluir los activos de una empresa en libros contables distribuidos (distributed ledgers, en inglés), que se ejecutan dentro de una blockchain, o emitir activos en forma de token NFT para su venta o distribución.
Como explica Cuy Sheffield, director de criptoactivos en la empresa de servicios financieros VISA, tokenizar activos en formato NFT podría desempeñar un papel relevante en el futuro del comercio minorista, las redes sociales, el entretenimiento, los marketplaces, y el mundo del arte, entre algunos sectores. Otros analistas, sin embargo, lo considera una moda pasajera con escasas aplicaciones reales y un fuerte componente especulativo.
Tokenomics: descubre las diferentes formas de tokenización de activos
Crear tu propia criptomoneda
Las Ofertas Iniciales de Monedas (Initial Coin Offerings, ICO, por sus siglas en inglés), las cuales se popularizaron y alcanzaron su pico entre 2017 y 2018, son una de las aportaciones de blockchain al mundo de las finanzas, porque permiten que cualquier empresa o proyecto obtenga financiación alternativa a los mercados tradicionales.
En los últimos dos años, los ICOs en entornos corporativos han pasado de ser "demasiado pequeños para tomarlos en serio" a convertirse en "demasiado grandes para ignorarlos” por el sector financiero y los reguladores, según destaca el informe la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE)
Este instrumento financiero, a medio camino entre una Oferta Pública (OPI) para cotizar en los parqués bursátiles, una ampliación de capital privado, y las herramientas de inversión en startups mediante rondas de financiación y los crowdfunding, presenta también algunas desventajas. La especulación y volatilidad que rodean las criptomonedas, el fraude y excesos de algunos ICOs durante los años del boom en 2018, y la incertidumbre y escasa regulación aplicable al lanzamiento de nuevas criptomonedas son algunos de los más relevantes.
En el plano técnico, una criptomoneda opera en su propia blockchain -o cadena de bloques- donde se registran todas las transacciones. Para comercializar una nueva criptomoneda habría que desarrollar una blockchain completamente nueva, pero también es posible utilizar alguna de las existentes mediante lo que se conoce como una bifurcación para crearla.
Tokenizar activos
A diferencia de las criptomonedas, consideradas utility tokens registradas en blockchain, los tokens vinculados a activos financieros más tradicionales de una empresa se llaman security tokens. En realidad, no hay gran diferencia entre ambos tipos tokens, ya que tanto los utility tokens como los security tokens se pueden comercializar mediante una ICO. Pero en el caso de lo security tokens también existen los STO (Security Token Offering). Los STO son un sistema de comercialización de criptoactivos, que podrían ser considerados como una emisión más tradicional de bonos o deuda corporativa mediante la venta de tokens digitales. Aunque siempre dependería del activo empresarial que respalde el token.
La deuda emitida para financiar proyectos es la más habitual, pero una empresa también puede tokenizar sus inmuebles, piezas de artes, y acciones en el mercado privado. Los inversores en security tokens percibirían un dividendo ligado al dinero y al retorno del proyecto que se financia.
Más allá del balance en la cuenta de resultados o el clásico Profit & Loss (beneficios y pérdidas), la tokenización de activos de las empresas en los distributed ledgers de blockchain también permite digitalizar la contabilidad de las empresas para aportar mayor transparencia a los inversores. Otro campo de experimentación del mundo corporativo con la tecnología blockchain es la trazabilidad de sus actividades y el seguimiento de la cadena de suministros con sus proveedores.
Diseñar tokens no fungibles, NFT
En ambos casos, los utility tokens (criptomonedas) y los security tokens (activos privados) son tokens fungibles e iguales, mientras que los NFT son tokens no fungibles, únicos e indivisibles, que se pueden certificar y comercializar mediante un smart contract (contrato inteligente).
La mayoría de los 17.700 millones de dólares en NFT (Tokens No Fungibles) que se comercializaron en 2021 correspondieron al sector de los videojuegos, objetos de arte, piezas de colección y moda, según el rastreador de mercado nonfungible.com.
El arte digital, con el debut en la casa de subastas Christie's de la obra 'Everyday: the Firts 5000 Days' y las colecciones CryptoPunks, CryptoKitties, y Bored Ape Yacht Club, fueron de las primeras en incursionar en este negocio de compra y venta de NFT. A los que se sumaron las empresas de moda, la industria de Hollywood, las competiciones deportivas, cantantes y artistas, y grandes marcas de consumo, entre las actividades más relevantes.
Si quieres saber más sobre los NFT, los fan tokens para aficionados de los equipos deportivos como fórmula para fidelizar a usuarios, y otros sectores que han comercializado NFT basados en sus activos digitales, puedes visitar GREX WORLD CONGRESS.