¿Quién es Lil Miquela? Influencer en el metaverso
Con millones de seguidores en redes sociales, los influencers virtuales se han convertido en los nuevos embajadores de las marcas y protagonizado campañas de publicidad.
Influencer virtuales
Lil Miquela es una influencer de Los Ángeles con más de 3 millones de seguidores en su cuenta de Instagram, y casi 300.000 suscriptores en su canal de Youtube. Las historias que comparte con su legión de followers son parecidas a las de otras influencers: unboxing de nuevos productos, campañas de publicidad para marcas de la talla de Calvin Klein, Balenciaga, Prada, o Chanel, y mensajes a favor de la comunidad LGBTQ+ o el movimiento Black Lives Matter.
La única diferencia es que Lil Miquela no es humana. Es un robot e influencer virtual creado por la agencia Brud. Una empresa especializada en marketing, que genera personajes por ordenador y los dota de su propia personalidad gracias a la inteligencia artificial.
Trayectoria Lil Miquela
En sus apenas seis años de vida, Miquela ha hecho de todo: se presentó al público en su cuenta de Instagram en 2016, y ayudó a levantar una ronda de financiación de 125 millones de dólares para lo que era una "startup tecnológica especializada en inteligencia artificial y robótica".
También ha cantado en Spotify, plataforma en la que tiene su propia lista de grandes éxitos, participado en el festival de Coachella, y protagonizado grandes campañas de publicidad. Entre las más conocidas, el anuncio -con polémica incluida- con la modelo Bella Hadid para Calvin Klein, o la campaña digital de Samsung #DoWhatyoucan't, la cual proponía a conocidos artistas como Millie Bobby Brown, el DJ Steve Aoki y el gamer Ninja, además de a la propia Lil Miquela, superar sus barreras.
Otros casos de éxito en el metaverso
En los últimos años, muchos personajes virtuales (algunos hiperrealistas y otros, no tanto) generados por ordenador están ganando notoriedad en las redes sociales y en la publicidad de muchas marcas. En Brasil, Lu Magalu es una conocida influencer digital, que se diseñó como asistente personal del sitio web de comercio electrónico, Magazine Luiza. Ante su gran aceptación, Magalu se convirtió en la cara de la marca en las redes sociales.
Otro ejemplo es el rejuvenecido avatar del Coronel Sanders, que diseñó la agencia Roarty Digital para la cadena de comida rápida KFC. Durante meses, compartió sus trucos de cocina en su cuenta de Instagram, habló de sus aficiones, y hasta presentó a su novia también virtual. Igual que la actriz Maisie Williams, quien se digitalizó para convertirse en embajadora de sostenibilidad de la marca H&M.
Liam Nikuro, amante de la música y productor multimedia. Bermudas, que se define como una "Robot Queen". Knox Frost, avatar virtual de 21 años que ayudó en una campaña de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para concienciar a los jóvenes sobre el coronavirus. Shudu.gram, "la primera supermodelo digital del mundo”. Imma.gram, una influencer virtual japonesa interesada en la cultura, el cine y el arte de su país y estrella de K-Pop…
El futuro de la IA y los personajes virtuales
Con la combinación de las nuevas tecnologías de visualización 3D y sofisticados algoritmos de Inteligencia Artificial (IA), los personajes virtuales se han vuelto mucho más realistas e interactivos. Aunque con problemas para captar matices y promover diálogos cercanos, los personajes virtuales ahora son capaces de responder a sus espectadores en tiempo real y replicar mejor las expresiones faciales para transmitir sentimientos.
Los influencers virtuales presentan algunas ventajas para las compañías. Pueden trabajar 24/7 y participar en varios eventos al mismo tiempo, no se cansan y su personalización permite alinear su identidad con la de la marca. Sin embargo, algunos expertos en marketing avisan que su engagement y rendimiento nunca se podrá acercar al de los influencers humanos. Sus diálogos son más planos y menos ingeniosos, y todavía desconocemos si los consumidores conectan con ellos por la novedad.
Su presencia en las redes sociales como escaparate de las marcas se intensificó durante la pandemia, aunque la verdadera revolución de estos avatares virtuales podría llegar con el desarrollo de nuevas plataformas inmersivas y todas las nuevas oportunidades para la publicidad en el metaverso.
Por el momento, ya existe todo un ecosistema en internet para crearlos. Zepeto, con la que se puede personalizar tu gemelo digital con miles de complementos de ropa y moda; Toonstar, que permitir el diseño de personajes animados; o Avatoon, que genera tu personaje a partir de una fotografía que luego se puede moldear, son algunas de las aplicaciones más conocidas.
Eventos en vivo, conciertos, vídeos, podcasts, videojuegos, galerías de arte, campañas creativas serán algunas de las posibilidades y experiencias asociadas a los metaversos. Y los avatares están llamados a jugar un papel central para interactuar con la comunidad y como reclamo de grandes producciones. En Grex World Congress puedes saber más sobre estos nuevos modelos de negocio y participar en la conversación sobre nuevas tecnologías.