03 septiembre 2024

Expresionismo: qué es, artistas y pinturas más famosas

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Uno de los movimientos artísticos más importantes del siglo pasado.

Son muchas las corrientes artísticas que componen lo que conocemos hoy en día como arte moderno: desde las escenas campestres del impresionismo hasta llegar a la mirada crítica del expresionismo. De naturaleza heterogénea, este movimiento aglutina diversas tendencias y estilos donde los artistas expresionistas plasman sus emociones y sentimientos por encima de la realidad colectiva. Originado en Alemania, se convirtió en una corriente artística que marcó un antes y un después en cómo las obras plasman el mundo según sus autores.

¿Qué es el expresionismo?

Surgido a principios del siglo XX en el país germano, el expresionismo se define como un movimiento de vanguardia caracterizado por la representación subjetiva, distorsionada y deformada de la realidad, reaccionando de manera contraria a los principios de objetividad del impresionismo. A diferencia del impresionismo, que se enfocaba en capturar la realidad tal como la percibían los sentidos, el expresionismo se centraba en el mundo interior del artista, en sus emociones y visiones personales. De esta manera, las obras expresionistas suelen ser dramáticas, intensas y a veces perturbadoras, reflejando la angustia, la alienación y la desesperación del ser humano ante un mundo moderno que les resultaba deshumanizante.

El expresionismo no solo se manifestó en la pintura, sino que también tuvo un gran impacto en otras disciplinas artísticas como la literatura, el cine, la arquitectura y el teatro. Sin embargo, fue en la pintura donde este movimiento encontró su forma más pura y directa de expresión.

Algunos estilos del expresionismo

A lo largo del tiempo, el expresionismo ha dado lugar a diversos estilos y submovimientos que, aunque comparten la misma esencia de expresar emociones intensas, lo hacen de maneras distintas. A continuación, se describen algunos de los estilos más representativos del expresionismo:

  • Expresionismo abstracto

El expresionismo abstracto es una de las ramas más conocidas y populares del expresionismo, que surgió en Estados Unidos durante la década de 1940 y 1950. Este estilo se caracteriza por la ausencia de formas reconocibles y la utilización de grandes pinceladas, colores intensos y un énfasis en el gesto y la acción del artista al crear la obra. Los pintores expresionistas abstractos, como Jackson Pollock y Mark Rothko, buscaban transmitir emociones y estados de ánimo a través de la abstracción total, liberando al arte de cualquier referencia concreta al mundo real.

  • Neoexpresionismo

El neoexpresionismo es un movimiento artístico que surgió a finales de la década de 1970 y principios de 1980, en respuesta al arte conceptual y minimalista que dominaba en ese momento. Este estilo recupera la intensidad emocional y la expresividad del expresionismo original, pero con un enfoque más contemporáneo y una mayor diversidad de influencias. Los artistas neoexpresionistas, como Jean-Michel Basquiat y Anselm Kiefer, se caracterizan por su uso de colores vibrantes, figuras distorsionadas y una fuerte carga simbólica, abordando temas como la política, la historia y la identidad personal.

  • Expresionismo cubista

El expresionismo cubista es una fusión de dos movimientos artísticos, el expresionismo y el cubismo, que se desarrolló principalmente en Europa a principios del siglo XX. Este estilo combina la emoción intensa y la subjetividad del expresionismo con la fragmentación geométrica y la descomposición de formas del cubismo. Los artistas que trabajaron en este estilo, como Pablo Picasso en algunas de sus obras, crearon composiciones que, a pesar de su apariencia abstracta y desestructurada, lograban transmitir poderosas emociones y una profunda carga simbólica.

  • Art Nouveau

El Art Nouveau, aunque no es estrictamente un estilo expresionista, comparte ciertas características con el expresionismo, especialmente en su enfoque decorativo y su interés por expresar emociones a través de formas orgánicas y sinuosas. Este movimiento, que se desarrolló a finales del siglo XIX y principios del XX, se caracteriza por el uso de líneas curvas, motivos vegetales y figuras estilizadas. Aunque el Art Nouveau es más decorativo y ornamental que el expresionismo, su búsqueda de la belleza y la expresividad a través del arte lo conecta, en cierta medida, con los principios expresionistas.

Características del expresionismo

El expresionismo refleja el desengaño y la crítica de los artistas a la sociedad burguesa de la época. La ausencia en el arte de este tipo de representación subjetiva del mundo inspiró la creación de dos grupos expresionistas de notable influencia en los diferentes estilos del movimiento: en el 1905, Die Brücke (El puente) y Der Blaue Reiter (El jinete azul), en el 1911.

Independientemente de sus estilos, los artistas expresionistas, inspirados en el trabajo de Vincent van Gogh, empleaban paletas de colores fuertes y expresivos y trazos exagerados y deformados. Utilizando estas dos técnicas, estos fusionaban la ridiculización de esa misma sociedad con la expresión de su espiritualidad.

Además, este movimiento también se caracteriza por:

  • La luz y la perspectiva quedan en segundo plano, alteradas de manera intencional.
  • La improvisación de las pinturas. Los artistas expresionistas no realizaban ningún trabajo previo a su obra final.
  • Una preponderancia de la figura humana y, sobre todo, un gran interés por los desnudos femeninos como representación del alma. Igualmente, la superposición de los paisajes urbanos, la naturaleza y el mundo onírico refuerzan el significado emocional de las obras.
  • Los expresionistas otorgaron al arte un papel redentor. Lo consideraban una liberación de sus sentimientos más ocultos.

Artistas expresionistas más importantes y sus obras más destacadas

Edvard Munch (1863–1944)

Edvard Munch, nacido en Noruega, es ampliamente considerado el precursor del expresionismo. Su vida estuvo marcada por una serie de tragedias personales que comenzaron con la muerte de su madre cuando él tenía solo cinco años, seguida por la pérdida de su hermana mayor a causa de la tuberculosis. Estos eventos, junto con su batalla con la soledad, la depresión y el alcoholismo, influyeron profundamente en su obra. Munch describió su proceso artístico como una forma de "diseccionar almas", reflejando su intento de captar las emociones más oscuras y complejas del ser humano.

El estilo de Munch contrastó fuertemente con las obras impresionistas de su tiempo, que tendían a enfocarse en la luz, el color y la vida cotidiana. En cambio, Munch exploró temas como la muerte, el miedo, la ansiedad y la melancolía, utilizando colores intensos y formas distorsionadas para transmitir sus emociones. Su obra más famosa, "El grito", es una representación icónica del miedo y la desesperación existencial. Este cuadro, robado y recuperado en dos ocasiones, es considerado una de las obras maestras del expresionismo y sigue siendo una de las imágenes más reconocibles en la historia del arte.

Ernst Ludwig Kirchner (1880–1938)

Ernst Ludwig Kirchner, uno de los principales fundadores del expresionismo alemán, jugó un papel crucial en el desarrollo del movimiento. En 1905, cofundó el grupo Die Brücke (El Puente), que buscaba un nuevo camino en el arte, alejándose de las tradiciones académicas y explorando nuevas formas de expresión. La obra de Kirchner se caracteriza por su uso arbitrario del color, simplificación de formas y un estilo deliberadamente crudo y primitivo.

Inicialmente, Kirchner se enfocó en paisajes, pero con el tiempo su interés se trasladó a la figura humana, especialmente a los desnudos y a escenas urbanas de Berlín. Estas últimas obras capturan la alienación y el caos de la vida moderna con un carácter escabroso y perturbador. Después de servir en la Primera Guerra Mundial, Kirchner sufrió un colapso nervioso que marcó el comienzo de un largo deterioro en su salud física y mental. Su arte fue posteriormente etiquetado como "degenerado" por el régimen nazi, y muchas de sus obras fueron destruidas o confiscadas. A pesar de estos desafíos, Kirchner dejó un legado duradero en el expresionismo, con obras destacadas como "Chica Sentada", un retrato de Fränzi, una niña de 10 años que sirvió como musa para muchos de los artistas de Die Brücke.

Vasili Kandinsky (1866–1944)

Vasili Kandinsky, nacido en Rusia, es uno de los pioneros del arte abstracto y una figura central en el desarrollo del expresionismo. Fundador del grupo Der Blaue Reiter (El Jinete Azul), Kandinsky creía que el arte debía trascender lo físico y material para expresar la "vida interior" del artista. Para Kandinsky, la belleza residía en la simplificación de las formas y en la armonía entre geometrías y colores.

Dividió su obra en tres categorías principales: impresiones, improvisaciones y composiciones. Las impresiones se inspiraban en la naturaleza, las improvisaciones expresaban emociones espontáneas y las composiciones eran creaciones más conscientes y estructuradas, basadas en la intuición. A lo largo de su carrera, Kandinsky pasó de un estilo figurativo, como en "Casas de Múnich", a una abstracción completa en sus "Composiciones", donde las formas y colores se utilizan para expresar ideas y sentimientos profundos. Kandinsky es reconocido no solo como un líder del expresionismo, sino también como una de las figuras más influyentes en el desarrollo del arte moderno.

Franz Marc (1880–1916)

Franz Marc, otro miembro destacado de Der Blaue Reiter, es conocido por sus vibrantes y emotivas pinturas de animales. Influenciado por el trabajo de Vincent van Gogh, Marc desarrolló un estilo que combinaba un uso expresivo del color con una simplificación de las formas. Sus retratos de animales, como "Caballo azul", son un intento de capturar la pureza y la vitalidad de la naturaleza, en contraposición al ser humano, al que veía como corrupto y destructivo. Marc creía que los animales representaban una forma de vida más auténtica y espiritual, y sus pinturas buscan reflejar esa creencia. En "Caballo azul", utiliza formas geométricas y colores intensos para crear una conexión entre el animal y su entorno, sugiriendo una unidad entre la naturaleza y el espíritu.

La muerte prematura de Marc en la Primera Guerra Mundial cortó una carrera prometedora, pero su obra sigue siendo una parte crucial del legado expresionista, representando la búsqueda de lo espiritual y lo esencial en un mundo cada vez más complejo y deshumanizado.

Como último apunte, para entender el expresionismo en su totalidad es necesario sentirlo y vivirlo. En IFEMA MADRID se organizan diversos eventos relacionados con el arte moderno y el arte en general. Se destaca, en especial, la Feria de Antigüedades, Arte y Coleccionismo, ANTIK PASSION Almoneda, un escaparate de arte e historia que no le dejará indiferente. Por supuesto, no podemos olvidar ARCOmadrid, uno de los eventos más importantes para el sector del arte internacional, que reúne las propuestas de arte contemporáneo de las galerías más destacadas.