LOS VEHICULOS ELÉCTRICOS.- MODOS DE RECARGA
Infraestructuras, funcionamiento y tiempos de recarga
Todos los vehículos eléctricos e híbridos enchufables (e excepción de los de pila de combustible por hidrógeno y los híbridos no enchufables) tienen que recargar sus baterías en una fuente de alimentación externa, por lo que se ha generado una estandarización de los tipos de carga en 4 modos de recarga que cuentan con sus correspondientes infraestructuras diferentes en cada modo.
De forma resumida, detallamos los 4 modos de carga actualmente existentes en el mercado:
H1: MODO DE RECARGA 1: “SCHUKO” (muy lenta)
Se refiere a la utilización de puntos de recarga no diseñados específicamente para cargar vehículos, es decir los enchufes convencionales domésticos (corriente alterna) con una toma monofásica que se denomina “SCHUKO” de 230 V donde se enchufa al vehículo.
Este modo de recarga está indicado para patinetes, bicicletas, hoverboards, pequeñas motos, etc, teniendo presente que no incluye ningún tipo de seguridad y por ello no se aconseja para mayores potencias (además de los largos tiempos de carga).
MODO DE RECARGA 2: CARGA LENTA
También para una recarga doméstica en nuestro garaje o plaza de aparcamiento, mediante conexión monofásica con 230 V y un máximo de 3,7 kW (a menos de 16 amperios con corriente alterna), con un conector / adaptador que proporciona la seguridad necesaria en una caja (que incluso cuenta con llave personal) que cuenta con un enchufe tipo “Schuko” con los sistemas adecuados de protección.
Este modo se considera adecuado para la carga de algunos tipos de vehículos híbridos enchufables (baterías de menor capacidad) o para pequeños vehículos eléctricos tipo “cuadriciclos”.
MODO DE RECARGA 3: CARGA SEMI-RÁPIDA
Precisa un dispositivo denominado “Wall-box” que es ya un punto de recarga exclusivo para recargar vehículos eléctricos, conteniendo diversos sistemas de protección que aseguran la instalación y la integridad del vehículo (usa entre 16 y 32 Amperios y hasta 22 kW, con corriente alterna).
Según la actual ley española (ITC-BT 52), este modo de recarga es obligatorio en puntos de recarga públicos con corriente alterna dedicada exclusivamente a este fin.
Perfectamente indicado también para uso doméstico en vehículos híbridos enchufables de elevada autonomía eléctrica y para vehículos 100% eléctricos.
La carga se realiza con conexión monofásica o trifásica, y se puede recargar hasta 32 A (a más de 7,2 kW/h y 400V), utilizando conectores de Tipo 1 (SAE J1772) o Tipo 2 (IEC 62196-2) según el vehículo, lo que hace que este modo vaya dejando atrás al anterior modo 2, al ser más fiable, seguro y rápido de cara a las nuevas baterías que están naciendo.
MODO DE RECARGA 4: CARGA RÁPIDA
Para cargas fuera de casa en puntos públicos de recarga o estaciones de servicio, consiguiendo recargar como mínimo un 70% de la capacidad de la batería en menos de 30 minutos en general (trabaja a partir de 44 kW).
En función del vehículo, el conector standard que utiliza es el japonés CHAdeMO o CSS, con conexión hacia el vehículo de Tipo 1 (SAE J1772 o Yakazi) o de Tipo 2 (IEC, Mennekes).
Se considera Modo 4 a partir de 50 kW/h y con corriente continua (los modos anteriores son con alterna), pudiendo ser de carga “súper rápida” o “ultra rápida”, siendo esta última en general en estaciones de servicio de uso público en exteriores para recargas en trayectos largos (o disponibilidad de poco tiempo), pero no se aconseja su uso diario ya que se puede dañar la batería.
Debido a su alto coste de instalación no están indicada ni diseñada para garajes particulares al ser complejo el soporte de la estructura necesaria en zonas privadas.
Nuestra mejor recomendación al adquirir un vehículo eléctrico o híbrido enchufable es montar en el garaje particular un punto de recarga modo 3, ya que es suficientemente rápido además de garantizar una adecuada seguridad en edificios y casas privadas, así como en parkings públicos.
Fuente imagenes: revista Motor Mundial