¿Qué coche comprar, híbrido o híbrido enchufable?
En este artículo desglosamos las diferencias que existen entre los vehículos híbrido y los híbridos enchufables en función del uso que vayamos a darle.
Como hablamos en el anterior artículo sobre vehículos 100% eléctricos, ahora es el turno de los híbridos o híbridos enchufables. Siempre en el marco de la nueva movilidad sostenible, que se trabaja en Global Mobility Call, y que impulsa modos de transporte que respetan el medio ambiente, aparece esta opción que también está más que presente en el parque móvil de nuestro país.
Para llevar a cabo este análisis, partimos de una base: una de las principales ventajas que tienen esta serie de coches es que ambos son respetuosos con el medio ambiente.
En el caso de los híbridos, existen desde hace muchos años, la primera marca precursora de esta modalidad de movilidad es la marca japonesa Toyota, que lleva patentando esta gama de vehículos respetuosos con el medio ambiente desde 1974. Mientras que la otra modalidad, híbrido enchufable, ha surgido con la nuevas demandas del mercado en busca de vehículos que puedan satisfacer las necesidades, sean cuidadosos con el medio ambiente y emitan un bajo número de emisiones.
Vamos a comparar en este artículo entre híbrido o híbrido enchufable, pero para saber exactamente cual es la modalidad que mejor se aplicará a cada usuario, resulta imprescindible conocer en qué consiste cada uno:
Características de los coches híbridos
Técnicamente, se denominan HEV. El vehículo híbrido es aquel que está impulsado por dos motores con distinto origen. Por un lado, cuentan con un motor de combustión y por otro, por uno eléctrico. De este modo, para impulsarse el vehículo es capaz de utilizar ambos propulsores con el objetivo de ser lo más eficiente posible.
Entre las ventajas que aporta este vehículo, a la hora de la circulación por las ciudades, es la etiqueta ECO. Este distintivo lleva asociado, dependiendo de la ciudad en la que residas, un descuento en la tarifa del estacionamiento regulado o la exención de prohibiciones durante los episodios de alta contaminación.
Características de los coches híbridos enchufables
Existen bajo la denominación PHEV, y se corresponden con aquel vehículo que dispone de propulsión doble, con un motor impulsado por propulsión y otro, con un motor eléctrico. Pero la diferencia reside en que el motor movido con energía renovable dispone de una batería de alto voltaje que puede ser recargada a través de conexión en la red eléctrica.
Este tipo de coches lleva consigo la etiqueta 0. En nuestro país, es el distintivo ambiental que mayor beneficios tiene, entre ellos, el acceso libre a zonas de bajas emisiones, aparcamiento regulado gratuito o utilizaciones de carriles de alta ocupación libremente.
Según estas definiciones, entendemos que son vehículos con un motor de combustión, junto con otro complementario que puede funcionar y recargarse de manera autónoma o bien a través de cargarlo a la corriente.
¿Con cuál quedarse?
Entorno a estas dos modalidades de vehículos surge una duda, ¿es mejor uno que otro? La respuesta es no. Todo depende de las facilidades de las que dispongas, del uso que vayas a darle y de lo que estés buscando en un vehículo. Por eso no es tanto cual será mejor sino cual se adapta mejor a mis necesidades.
Quizá, además de saber el uso que vamos a darle al coche, el tipo de trayecto y por qué vía, también es imprescindible saber el formato en el que vamos a recargar el coche, siempre y cuando optemos por la opción del híbrido enchufable. En estos casos, debemos disponer de una estación de carga bien sea en nuestra casa, plaza de parking o garaje, o en un punto público. Eso sí, este último tendrá un incremento en el precio.
Está claro que los híbridos enchufables te pueden ofrecer más autonomía eléctrica por su carga real, y dispones, como conductor, de la capacidad de saber con qué propulsor te quieres mover en cualquier momento. Por ello, resultan una buena opción si la mayoría de los trayectos son por la ciudad. Mientras que por la parte del vehículo híbrido, su comportamiento es mucho más eficiente que un motor de combustible normal, y juega con la parte eléctrica en función de las necesidades de la conducción.
Y lo contrario ocurre en trayectos largos, el vehículo que puedes enchufar a la red, quizá se queda algo corto ya que no puedes aprovechar esta modalidad durante muchos kilómetros, y si quieres hacerlo, te verás condicionado a hacer paradas para recargar cada pocos kilómetros. Mientras que el híbrido te servirá para cubrir estos trayectos de manera más económica en lo que a gasto de gasolina se refiere. Esto tiene una clave, el peso. El motor enchufable soporta mayor peso, por ello el híbrido es más ligero y consume un menor gasto.
En lo que a precios se refieren, estos vehículos están en un rango similar, situándose algo más por encima el vehículo híbrido enchufable por el coste que supone la implementación del motor recargable.
Las conclusiones: en función de la utilidad
Tras llevar a cabo este análisis, queda demostrado que no será mejor un vehículo u otro, sino que lo que se debe estudiar a la hora de hacerse con uno de estos vehículos será el uso que vayamos a darle, y cómo y por donde haga estos kilómetros.