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12 enero 2021

Los sectores productivos que más dependerán del frío en 2021

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Preservar la cadena de frío será este año más importante que nunca para mantener la salud, proteger la seguridad alimentaria y garantizar el traslado y la conservación de medicamentos y vacunas. Además, en 2021 aumentarán las instalaciones con bajo GWP, proliferarán nuevos refrigerantes y se extenderán los sistemas de detección de fugas con tecnología infrarroja.

Preservar la cadena de frío será en 2021 un elemento fundamental para asegurar la salud, la seguridad alimentaria, y la correcta conservación de medicamentos y vacunas. Como explica Manuel Mellado, Jefe de Producto de Coreco, “la cadena de frío pretende mantener la inocuidad de los alimentos, preservando e impidiendo la multiplicación de microorganismos”. Esto se consigue refrigerando o congelando los productos en las tres etapas por las que discurren: “almacenamiento, transporte, y punto de venta o servicio”. Hay que tener en cuenta que no todos los alimentos son iguales en cuanto a “temperatura, humedad y tiempo de conservación”, por lo que cada uno requiere de condiciones precisas que deben tenerse en cuenta.

En el sector biomédico cobra especial transcendencia la preservación de una correcta temperatura, “tanto en la fase de investigación, como en la de transporte y almacenamiento de los llamados termolábiles, vacunas y medicamentos, entre otros”, para lo que se hace imprescindible una constante monitorización. Además, Mellado indica que “cada vez vemos más soluciones basadas en la conectividad y el análisis de datos, que ayudan a anticipar posibles desviaciones fuera de los rangos correctos de temperatura, soluciones que son de obligado uso en el sector biomédico”.

Deshumidificadores

Valentín Onís, Director Comercial de Fisair Ibérica, incide en la importancia que tiene la cadena del frio en las industrias relacionadas con la alimentación, para conservar los productos y evitar que éstos se alteren y se conviertan en perjudiciales para el consumo humano. “Para ello es necesario almacenarlos en cámaras frigoríficas con temperaturas negativas”.

Onís explica que, en este tipo de procesos, se requiere la instalación de un deshumidificador por rotor desecante, para evitar las infiltraciones incontroladas del aire exterior al interior de las cámaras que podrían producir hielo o escarcha. “Con el deshumidificador conseguimos unas condiciones más estables de temperatura y humedad, y un ahorro energético al reducir los periodos de desescarche de los evaporadores, así como menos horas trabajo para alcanzar las condiciones prefijadas de temperatura y humedad”.

Cambios en el mercado de gases

Los expertos prevén que en 2021 se produzca una aceleración de los cambios en las soluciones implantadas debido a la evolución del mercado de gases. Jordi Cabello, Director Comercial de Pecomark, pronostica que “veremos un fuerte incremento de las instalaciones con bajo GWP” (potencial de calentamiento global), lo que llevará a “un mayor número de instalaciones de frío comercial con nuevos refrigerantes A2L y CO2, sin descuidar la eficiencia energética”. Por este mismo motivo, Cabello afirma que “también los sistemas de detección de fugas de refrigerante avanzados con tecnología infrarroja tendrán una mayor implantación”.