12 abril 2024

El coleccionismo de la estampa japonesa

Autor
Mª Cristina Pacheco Méndez
Tiempo de lectura
9 min.
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Cómo es el perfil de coleccionistas de estampas japonesas

El coleccionismo de arte japonés comienza con la apertura de Japón a Occidente, desarrollando un fenómeno llamado japonismo y localizado principalmente en Europa.

La llegada de las estampas Ukiyo-e a las Exposiciones Universales del siglo XIX, generaron un gran revuelo, destacando la Exposición Universal (1876) de Filadelfia en Estados Unidos. Gracias a ella, Henry O. Havemeyer (1847–1907) adquirió una de las primeras copias de La Gran Ola, actualmente expuesta en el Museo Metropolitano de Arte en Nueva York.

Qué es Ukiyo-e

El término Ukiyo-e (“mundo flotante”) hace referencia a la temática que representa la estampa, no a la técnica artística en sí misma. Se trata de un movimiento artístico en Japón que abarcó desde el siglo XVII al siglo XIX, donde generalmente predomina la representación de todo tipo de escenas como costumbristas, paisajes, guerras e incluso eróticas. Estaban regidas por las modas y tendencias de la época, siendo además muy accesibles. Hokusai fue uno de los artistas más relevantes y pertenecía al periodo Edo que abarcaba desde 1603 a 1868. Otros artistas también reconocidos son Utagawa Kuniyoshi (1798-1861) o Tsukioka Yoshitoshi (1839-1892).

Las xilografías se realizaban sobre madera y usando un único color, pero con el paso del tiempo esto cambió a un coloreado a mano con dos o tres colores más, aunque depende del estilo del autor.

Este interés por las estampas no desarrolló un impacto directo de compraventa en España por la falta de especialistas, aunque hay alegatos en la prensa ilustrada en donde se destaca a Hokusai como uno de los más relevantes dentro de este género. Más adelante, hay evidencias sobre los precios de venta de las estampas y consejos de coleccionismo. Durante el siglo XX, la creación de este tipo de ilustraciones fue constante, pasando de 8 a 10.000 copias aproximadamente, aumentando el número de coleccionistas.

Características del coleccionista

El perfil coleccionista que se interesa por las estampas Ukiyo-e combinan los impulsos más pasionales y la razón, iniciándose con un proceso de búsqueda de información para conocer la pieza antes de adquirirse. Pues nunca termina de obviarse la perspectiva de la inversión económica.

Con el tiempo este tipo de obra se ha convertido en un valor “marca” generando que haya un desarrollo de láminas, postales o carteles, siendo piezas más económicas y accesibles y permitiendo que un público con un bajo poder adquisitivo pueda comprarlas. Lo que ha derivado entonces al uso de las estampas japonesas como diseño. Ejemplo de ello lo encontramos en La Gran Ola, una de las obras más famosas de este movimiento y que se sitúa ya no solo como referencia sobre la cultura japonesa, sino también en todo tipo de diseños actuando como una estrategia de marketing, pudiéndola ver hoy en día en piezas de mobiliario, papelería, comida o incluso emojis.

El impacto comercial de La Gran Ola de Kanagawa de Hokusai

La Gran Ola es una ilustración que forma parte de una serie de 46 estampas llamadas Treinta y seis vistas del monte Fuji, con un formato novedoso llamado ōban yoko-e (obra de 38x26cm colocada en horizontal). En la escena se observa una pequeña barca surcando una gran ola, la cual está a punto de destruirla y presentando un gran movimiento. A lo lejos, se puede ver representado el Monte Fuji que gracias a la paleta de color se mimetiza con el resto de los elementos del dibujo, unificando toda la escena.

Esta estampa está presente en todo tipo de formatos, desde las impresiones originales hasta diseños comerciales actuales como ropa, cartelería, papelería o mobiliario. Un reciente estudio de Art Price nos muestra que actualmente La Gran Ola de Hokusai es una de las 10 obras ilustradas más caras vendidas en 2021, junto con artistas como Picasso, Basquiat o Bansky.

Uno de los principales métodos de venta de este tipo de piezas es a través de las subastas, destacando Christie’s. A partir de un estudio se pudo observar claramente un incremento y una revalorización, sobre todo a partir de 2017 hasta 2021, llegando hasta los 6 millones de dólares. A lo largo de los últimos diez años los precios de remate superaban con diferencia los precios que se habían estimado inicialmente, los cuales dependen de la presencia de marcas de impresión, estado de conservación o calidad, entre otras.

En una de las subastas más recientes celebrada en marzo de 2021 en Christie’s Nueva York, salió un lote con dos versiones de La Gran Ola, la primera se remató por 1.59 millones, todo un récord para el artista. La segunda, al tener una calidad inferior, tuvo un precio de remate de 437.500$. Takaaki Murakami, especialista en arte oriental, exponía en un artículo de Barneby’s que los resultados obtenidos y la gran participación que hubo nos indicaban el poder del mercado en donde los clientes buscan obras de arte de alto nivel para sus colecciones.

Un reciente estudio de Art Price nos explica que actualmente La Gran Ola ha sido convertida en un formato NFT y adquirida por un coleccionista privado. Esto pudo desarrollarse gracias a The British Museum junto con la colaboración de la plataforma La Collection. La obra está catalogada “rare category”, ascendiendo a un precio de 45.000$.

Se concluye con que esta revalorización es debida a las constantes influencias actuales de la cultura japonesa sobre Occidente, su exotismo y valor histórico, y sobre todo la participación de la obra en otros sectores como la publicidad, el marketing o el diseño. La cultura japonesa está muy ligada a unos valores de armonía y equilibrio, una filosofía de vida que las estampas Ukiyo-e han sabido representar.

La influencia del japonismo en la sociedad y el arte

Esta cultura ha influenciado de manera directa tanto al arte Occidental, como a artistas españoles como Santiago Rusiñol o Mariano Fortuny, así como a artistas pertenecientes al movimiento impresionista como Degas, Claude Monet o Henri Rivière, quienes destacaron a su vez, por ser grandes coleccionistas de estampa japonesa. También músicos como Claude Debussy que fue inspiración para crear su pieza La Mer o poetas como Rainer Maria Rilke para su obra Der Berg.

Cabe destacar a Vicent Van Gogh, ya que sentía gran admiración por este artista y fue poseedor de 500 estampas tal y como el pintor relata en las cartas enviadas a su hermano Theo, destacando este pasaje de una de ellas en donde habla sobre La Gran Ola:

Hokousai te fait jeter le meme cri – mais lui par ses lignes, son dessin, lorsquea dans ta lettre tu te dis: ces vagues sont des griffes, le vaisseau est pris là-dedans, on le sent.

“Hokusai te hace llorar de la misma manera – pero en este caso con sus líneas, su dibujo, desde que te dijiste a ti mismo en tu propia carta: estas olas son las garras, el barco está atrapado en ellas, puedes sentirlo.” (Traducción propia, Van Gogh, 1888)

Otro de los sectores donde encontramos a la figura de Hokusai es el cine. En 2020 se estrenó en el Festival Internacional de Cine de Tokio una película sobre la vida de la artista dirigida por Hajime Hashimoto que además celebra el 260º aniversario del artista. También, por a la participación de Tokio en los Juegos Olímpicos de 2020, Araki Hirohiko creó un cartel llamado “The Great Wave off the Coast of Kanagawa” para los Juegos Paraolímpicos, inspirado en La Gran Ola y en uno de los mangas más famosos actualmente, creando un contraste entre el estilo más tradicional y actual. Actualmente existe un movimiento sociocultural llamado Japan’s pop culture en donde mezclan la tradición japonesa y la cultura moderna.

Fuentes:

  • Almazán Tomás, V. D. (2003). La seducción de Oriente de la: «chinoiserie» al «japonismo». Artigrama, 18, 83–106.
  • Almazán Tomás, V. D. (2007). La huella de Hokusai en España: valoración crítica, influencia, coleccionismo y exposiciones. En E. Barlés Báguena (Ed.), La Investigación sobre Asia Pacífico en España (p. 538). Universidad de Granada.
  • Almazán Tomás, V. D. (2013). El grabado japonés ukiyo-e la colección de arte oriental de la Real Academia de Bellas Artes Santa Isabel de Hungría en Sevilla. Temas de estética y arte, 27, 85–120.
  • Cabañas Moreno, P. (2003). Una visión de las colecciones de arte japonés en España. Artigrama, 18, 107–124.
  • Martinez Mingarro, E. (2010). El coleccionismo de arte japonés en España. Coleccionistas en activo: Daniel Montesdeoca. En Cruce de miradas, relaciones e intercambios (pp. 301–316). Universidad de Granada.

Mª Cristina Pacheco Méndez